Un fiscal federal de Morón, Argentina, procesó formalmente este martes a la viuda y al hijo del fallecido narcotraficante colombiano Pablo Escobar por lavado de dinero en ese país suramericano, en el que viven desde mediados de los 90, y ordenó el embargo de sus bienes por $1.2 millones.
La medida judicial contra María Isabel Santos y su hijo Sebastián Marroquín se tomó después de una investigación de cerca de dos años en la que la Fiscalía dice tener pruebas suficientes que demostrarían que la viuda y el heredero del antiguo capo del Cartel de Medellín fueron los intermediarios en la operación de lavado de activos del narco colombiano José Piedrahita Ceballos, alias Simón, e inversionistas argentinos.
«Sin la particular intervención activa de ellos [la viuda y el hijo de Pablo Escobar], las cuestionadas inversiones de Piedrahita Ceballos no se hubieran concretado, así como tampoco las maniobras criminales de lavado de activos de origen ilícito corroboradas», aseguró el fiscal Néstor Barral en una resolución publicada este martes.
Piedrahita, preso en Colombia y pedido en extradición por Estados Unidos, logró lavar en Argentina más de $3 millones y 1.5 millones de pesos argentinos [cerca de $60,000], de acuerdo con la fiscalía federal.
Por esta intermediación, Santos y Marroquín habrían recibido una comisión del 4.5 por ciento por ser el enlace entre Piedrahita y el abogado argentino Mateo Corvo Dolcet, considerado por medios locales el cerebro de la red de lavado de dinero a través de negocios inmobiliarios y gastronómicos.
Tanto Santos como Marroquín han negado las acusaciones en su contra y argumentaron en un documento escrito que estaban siendo investigados «por una mera cuestión de índole familiar» con el temido narcotraficante colombiano.
El futbolista colombiano Mauricio «el Chicho» Serna, ex jugador del Boca Juniors, también fue procesado por la misma investigación, en la que se le señala de haber canjeado bienes suyos en Argentina por unas propiedades del capo Piedrahita en Colombia.
«Serna receptó una mayor cantidad de dinero por el bien inmueble habiendo suscripto el contrato de compraventa con Piedrahita por montos inferiores de manera intencional. Ello, en un acto que, entiendo, se efectuó (para) contribuir al blanqueo de capitales de origen ilícito», aseguró el fiscal Barral en su declaración.